DESARROLLO:
Lo
principal es conocer que es el fenómeno: Los
huracanes son enormes tormentas tropicales giratorias caracterizadas por
poderosos vientos y lluvias torrenciales. El fenómeno tormentoso alcanza a
veces 800 kilómetros de diámetro y está constituido por vientos y nubes que
forman una espiral en torno a un centro común que se denomina “ojo”. El aire es
tranquilo y sin nubes en la zona del ojo, que mide unos 25 kilómetros de
diámetro, pero está rodeado por una enorme pared de densas nubes que producen
las precipitaciones más intensas del huracán y en la que el viento alcanza
mayor velocidad. Para que una tormenta se clasifique como huracán, sus vientos
deben soplar por lo menos a 120 kilómetros por hora, pero su velocidad
alrededor del ojo suele superar con frecuencia los 240 kilómetros.
Los huracanes y ésa es su
característica se desplazan hacia el oeste sobre el océano Atlántico y azotan
las islas del Caribe y las costas de Norteamérica. Cuando el mismo tipo de
tormentas se forma en los océanos Pacífico e Índico, reciben el nombre de
tifones y ciclones tropicales. Pero cualquiera que sea su denominación, el
resultado suele ser el mismo: un trágico balance de muerte y destrucción.
Los
huracanes y las ondas tropicales mueven masas considerables de nubes
desplazadas por los vientos y que provocan la presencia de las fuertes lluvias
que son un fenómeno natural en Guadalajara,
Jalisco. La cual se ha caracterizado por presentar cada año
inundaciones en puntos específicos, no es reciente el hecho de que, tras cada tormenta fuerte
sobre algún sector de la ciudad, se presenten encharcamientos o inundaciones de
considerable altura. Los riesgos por inundaciones, se presentan por la
conjugación de una serie de factores que van desde el origen de la lluvia que
provoca un aumento en los volúmenes de agua, hasta la ubicación de los
asentamientos humanos en antiguos cauces o en terrenos muy cercanos a estos. Cuando los huracanes azotan la
tierra, lo hacen de forma triple con vientos, lluvias y oleajes. Los fuertes
vientos que circundan el ojo pueden con facilidad arrancar árboles, levantar
tejados de edificios y volcar coches. Las tormentas suelen dejar caer unos 150
milímetros de lluvia, por lo común en precipitaciones torrenciales que causan
extensas inundaciones. Pero es peor aún el oleaje que produce el huracán en las
costas: los vientos levantan en el mar olas tremendas que a veces penetran
tierra adentro como macizas murallas de agua que inundan todo la que se
encuentra a su paso, una de las consecuencias sociales seria el temor y el
impacto psicológico de las personas que viven estos fenómenos al estar con la
constante incertidumbre de no saber si volverá a ocurrir una situación de
desastre, así como el dolor de las
perdidas materiales y humanas, afortunadamente no vivo cerca de las playas en
mi ciudad las fuertes lluvias solo provocan inundaciones, caídas de arboles y
daños materiales pero si han ocurrido perdidas humanas a consecuencia de estas
causas, principalmente por no seguir las recomendaciones.
Después de estudiar en este modulo los fenómenos naturales he aprendido que aunque la naturaleza es implacable, si nos informamos y participamos como una comunidad responsable y colaborativa siguiendo las indicaciones preventivas podremos minimizar los daños provocados por los fenómenos naturales ya que en ocasiones como el caso de inundación las personas contribuimos de manera irresponsable al tirar basura en las calles y al ubicar viviendas en zonas de los causes naturales.
La diferencia en mi nueva postura, se debe a que he aprendido y conocido mas a fondo el tema estoy consciente de que, gracias al acceso que tenemos a la información, ahora por medio de las redes sociales podemos comunicarnos y organizarnos en caso de un desastre natural y así estar informados para actuar de la mejor manera y así evitar perdidas humanas y materiales.
Las principales recomendaciones antes del fenómeno natural son:
Retirar del exterior de la vivienda, aquellos objetos que puedan ser arrastrados por el agua.
Revisar, cada cierto tiempo, el estado del tejado, el de las bajadas de agua de edificios y de los desagües próximos.
Colocar los documentos importantes y, sobre todo, los productos peligrosos, en aquellos lugares de la casa en los que el riesgo de que se deterioren por la humedad o se derramen, sea menor.
No estacionar vehículos ni acampar en cauces secos, ni a la orilla de ríos, para evitar ser sorprendido por una súbita crecida de agua. Ante situaciones de emergencia originadas por lluvias intensas.
En el momento del fenómeno natural es muy importante:
Mantenernos permanentemente informados a través de la radio y de otros medios de comunicación, de las predicciones meteorológicas y el estado de la situación.
Si llegara a inundarse la vivienda, es fundamental abandonar cuanto antes los sótanos y plantas bajas y desconectar la energía eléctrica utilizando linternas para el alumbrado.
Si tenemos que viajar, procurar circular, preferentemente, por carreteras principales y autopistas.